Somos Tu Clínica Dental En Las Palmas

Introducción:
En la Clínica Dental Arenales, cada semana recibimos a familias que llegan preocupadas por un golpe, una caída o un accidente en la boca de sus hijos. Sabemos que ver a tu hijo sangrar o perder un diente puede ser un momento de gran angustia. Y también sabemos que, en esos instantes, actuar rápido y de la manera correcta puede marcar la diferencia entre salvar el diente o perderlo para siempre.
Por eso hemos querido preparar este artículo. Queremos que lo leas con calma y lo guardes, porque nunca sabemos cuándo lo vas a necesitar. Nuestra misión no es solo tratar dientes, sino acompañar a las familias y darles la seguridad de que están en buenas manos.
Los golpes en la infancia: más comunes de lo que crees
Como dentistas, podemos asegurarte que los traumatismos dentales en niños son más frecuentes de lo que imaginamos. Muchos padres nos dicen: “Pensé que estas cosas solo pasaban en películas”. Pero la realidad es que los niños pasan gran parte del día en movimiento: corren, saltan, montan en bicicleta, patinan o juegan al fútbol.
Es en esos momentos de diversión cuando un simple tropiezo puede acabar con un diente roto o caído. De hecho, se estima que casi un tercio de los niños sufre algún tipo de traumatismo dental antes de los 14 años.
En nuestra clínica hemos atendido casos de todo tipo:
El pequeño que jugando en el parque se cayó de un columpio.
La niña que en una clase de baile chocó con otra compañera.
El adolescente que jugando al baloncesto perdió un incisivo.
Lo importante aquí es entender que estos accidentes son normales y que no se trata de culparnos como padres, sino de saber reaccionar correctamente.
Lo primero: ¿diente de leche o definitivo?
Cuando nos llaman por teléfono para contarnos que un niño se ha caído y ha perdido un diente, lo primero que siempre preguntamos es:
👉 “¿Sabes si es un diente de leche o un diente definitivo?”.
Esto es clave porque la actuación es muy diferente:
Dientes de leche
No deben reimplantarse.
Si intentamos colocarlo de nuevo, podemos dañar el germen del diente definitivo que está justo debajo.
Lo que haremos en la clínica será revisar la zona, controlar el sangrado y asegurarnos de que el diente definitivo erupcione bien en el futuro.
Dientes definitivos
Aquí sí estamos ante una urgencia dental real.
El tiempo corre en contra: cuanto antes llegues a la clínica, más opciones tenemos de salvar ese diente.
En este caso, te explicamos cómo debes actuar paso a paso antes de llegar a vernos.
Cómo actuar si tu hijo pierde un diente definitivo
Desde nuestra experiencia, los padres que saben lo que hay que hacer reaccionan mucho mejor y llegan a la clínica con más opciones de éxito.
Los pasos son sencillos, pero muy importantes:
1. Mantén la calma y tranquiliza a tu hijo
Sabemos que no es fácil. El niño estará asustado, probablemente llorando y con sangre en la boca. Pero tu actitud es fundamental: si tú te alteras, él se asustará más.
Respira, habla con calma y explícale que vais a ir al dentista y que todo se va a solucionar.
2. Recupera el diente correctamente
Recógelo del suelo o del lugar donde haya caído.
Sujétalo siempre por la corona (la parte blanca que se ve al sonreír).
Nunca lo toques por la raíz, ya que contiene células muy delicadas que necesitamos para reimplantarlo.
Si está sucio:
Enjuágalo solo con agua o con suero fisiológico, muy suavemente.
No lo frotes ni lo limpies con jabón.
No lo seques con un pañuelo ni lo envuelvas.
3. Consérvalo en el medio adecuado
Un error muy común es guardarlo en seco, en un pañuelo o en una bolsita. Esto hace que el diente se deteriore.
Lo ideal es:
Colocarlo en un vaso con leche entera.
Si tienes a mano, usar suero fisiológico.
Como última opción, puedes colocar el diente dentro de la boca del niño, entre la mejilla y las muelas, siempre que sea lo bastante mayor para no tragárselo.
4. Ven a vernos lo antes posible
El tiempo es fundamental.
La primera hora después del accidente es decisiva.
Cada minuto cuenta para que podamos reimplantar el diente con éxito.
En la Clínica Dental Arenales atendemos urgencias dentales y sabemos que, cuanto antes llegues, más probabilidades tendremos de salvar el diente.
Lo que hacemos en la clínica cuando llegas con un diente avulsionado
Muchos padres nos preguntan qué vamos a hacer en cuanto lleguen. Queremos que lo sepas para que estés tranquilo:
Exploramos al niño para comprobar si hay heridas en labios, lengua o encías.
Revisamos el estado del diente y de la raíz.
Si es viable, lo reimplantamos en su lugar y lo fijamos con una férula dental.
En los días siguientes, hacemos un seguimiento para comprobar que cicatriza bien y que no hay infección.
En algunos casos, más adelante, puede ser necesario hacer un tratamiento de endodoncia para garantizar que el diente se mantenga fuerte. Pero lo más importante es conseguir que ese diente vuelva a su sitio lo antes posible.
Lo que no debes hacer nunca
Hemos visto de todo en urgencias, y queremos que tengas muy claro qué cosas no hacer:
No intentes recolocar tú mismo el diente en casa.
No lo limpies con jabón ni lo desinfectes con alcohol.
No lo dejes en seco en un pañuelo.
No esperes a ver si “se pasa”. El tiempo es oro.
Preguntas que nos hacen los padres
En consulta y por teléfono recibimos siempre las mismas dudas. Aquí te dejamos las más comunes con sus respuestas:
¿Y si el diente es de leche?
No lo reimplantamos. Lo controlamos para que el definitivo salga bien.
¿El reimplante duele?
El procedimiento se hace con anestesia local. El niño no sentirá dolor durante la colocación.
¿Qué pasa si no encontramos el diente?
Buscaremos soluciones para mantener el espacio y evitar problemas de mordida en el futuro.
¿Podría haber afectado al hueso?
En algunos casos, el golpe es fuerte y también lesiona el hueso. Por eso hacemos siempre radiografías.
Nuestra experiencia con casos reales
Queremos compartir un ejemplo que vemos a menudo. Hace unos meses recibimos a una familia que vino corriendo porque su hijo de 9 años se cayó de la bicicleta y perdió un incisivo. Los padres habían leído antes este tipo de consejos, así que actuaron rápido: lo guardaron en leche y llegaron en menos de 40 minutos.
Pudimos reimplantar el diente y, gracias a la rapidez, hoy el niño mantiene su diente natural. Este caso nos recuerda por qué es tan importante que los padres sepan qué hacer.
Consejos para prevenir estos accidentes
Aunque no siempre podemos evitarlos, sí podemos reducir los riesgos:
Usar protectores bucales en deportes como fútbol, baloncesto, artes marciales o patinaje.
Enseñar a los niños a no correr con objetos en la boca.
Acudir a revisiones dentales periódicas para detectar cualquier problema.
Reforzar la higiene y el cuidado diario de los dientes.
Conclusión
Como clínica dental, lo que más nos importa es que te quedes con estas tres ideas claras:
Mantén la calma y tranquiliza a tu hijo.
Conserva el diente correctamente si es definitivo.
Ven a vernos lo antes posible.
En la Clínica Dental Arenales, en el centro de Las Palmas, estamos preparados para atenderte en cualquier urgencia. Nuestro equipo de odontopediatría y de urgencias dentales está aquí para cuidar la sonrisa de tu hijo con la profesionalidad y la cercanía que nos caracteriza.
👉 Guarda nuestro número en tu móvil. Nunca sabes cuándo lo vas a necesitar, y recuerda que no estarás solo: estaremos a tu lado para ayudarte en ese momento de angustia.
📞 Clínica Dental Arenales – Tu dentista de confianza en Las Palmas